Redacción Alta Gracia- La iniciativa había sido presentada por la Fundación Espacios en mayo pasado y aún el municipio no le otorgó la habilitación para que funcione. «Espacios Truck» es un proyecto de cafetería, gastronomía que llevarán adelante personas con discapacidad de Alta Gracia. 

En mayo de este año la Fundación Espacios presentó el «Espacios Truck», que consiste en implementar una cafetería itinerante que se configure como un espacio laboral de formación.

Con el formato de cafetería itinerante a través de los conocidos camiones llamados food truck generar un espacio para que personas con discapacidad, no sólo de la fundación sino abierto a otras instituciones, puedan capacitarse y formarse para que puedan tener una salida laboral.

Esta propuesta fue muy bien recibida por el Concejo y el Ejecutivo. Sin embargo, al día de hoy todavía no se puede poner en práctica porque no se les otorgó la habilitación municipal correspondiente.

«Hemos presentado una nota al Concejo Deliberante para saber en qué instancia está nuestro trámite porque necesitamos empezar a ponerlo en práctica», dijo a este medio Verónica Antunes tesorera de la Fundación.

Desde el Concejo se habían comprometido ante los referentes de la ONG elaborar una ordenanza que regule la actividad exclusivamente de este tipo de emprendimientos que no son comerciales, pero sí de inclusión y formación.

«Ya tenemos listo el camión para trabajar, hemos pedido un préstamo al banco para comprar todo lo necesario, ya hemos capacitado a las personas que participarán en este proyecto pero no podemos empezar porque no tenemos el permiso», explicó Antunes.

Desde el Concejo se comprometieron a abordar el tema en la comisión de Legislación General donde se encuentra el expediente y posiblemente el próximo lunes 14 serán convocados a reunión de concejo en comisión.

El proyecto

En la misiva enviada al cuerpo legislativo local repasan los objetivos del proyecto que se pretende implementar:

«La Fundación Espacios propone el formato de cafetería itinerante inclusiva, que se configuraría como un espacio laboral donde los trabajadores con discapacidad tendrían un contrato y un sueldo equivalente al salario mínimo, en el que se puedan implementar programas de intervención, centrados en la persona que, en un plazo de tiempo determinado, sirvan para una inclusión real. (…)

El desarrollo de un trabajo es uno de los motores más poderosos para ayudar a la persona con discapacidad a construir su identidad como miembro adulto de la comunidad, siendo nuestra intención posicionar a Alta Gracia como pionera en este cambio de paradigma desde la óptica inclusiva».

Foto: Diario Tortuga