Por María Luz Cortez. Luciano «Lucho» Urruti se embarcó en un proyecto denominado «Real, strong and pretty women» (Mujeres reales, fuertes y bonitas) que a través de fotografías retrata a mujeres con historias de vida difíciles y que han logrado superarlas. Las imágenes impactan por la belleza y el retrato directo sin sutilezas de las consecuencias de esas vidas.
La primera retratada: Carina Zejdlik cuenta
«La vida te sorprende y esas sorpresas son el anuncio de lo que está por venir. En junio de 2017 me diagnosticaron carcinoma ductal infiltrante, un cáncer de mama invasivo que derivó en operaciones y tratamiento oncológico de quimioterapia y rayos.
Preguntarme «por qué a mí » no me conducía a nada. Poco a poco fui buscandole el «para qué» .
Hoy a mitad del tratamiento rescato la cantidad de personas que desde el amor se han acercado a sostenerme y acompañarme,ya sea con un mensaje, un gesto, compañía o una oración.
Bendecida me siento desde ese lugar y sé q cada día es un desafío y la oportunidad de agradecer a Dios y a la vida el seguir adelante. «Jamás una huida por muchos que sean».
El proyecto
El joven fotógrafo Lucho Urruti explicó que un día soñó con una muestra de fotos y con un título. «Cuando me desperté me di cuenta que estaba rodeado de mujeres hermosas y fuertes», recordó. Respecto de la manera de seleccionar, detalló: «Sólo pienso en quien me transmite ganas de vivir, ganas de dar batalla y no bajar los brazos, y simplemente le hablo por redes sociales contando de mi proyecto y si les gustaría sumarse».
Urruti precisó que busca retratar la bella que hay en cada una y que además quiere demostrarles que no están solas, que siempre se puede salir adelante. Las participantes, por el momento, fueron de Alta Gracia, Córdoba Capital, San Juan, Santa Fe, aunque ya hay pedidos de otros puntos del país.
Respecto del relato en cada fotografía, precisó que mujer lo arma, pero que él suele ayudarlas a resumir. «Es bastante difícil querer contar una historia de vida en pocas palabras», reconoció.
«Me parece que todas las mujeres son ejemplo de fortaleza. Todos tenemos nuestras batallas. Pero elijo a ellas porque se que son la fuente de inspiración para muchas mujeres a su alrededor», concluyó. «Espero que este proyecto siga creciendo ,llegando a cada rincón que sea necesario leer estas historias», adelantó entusiamado.
Las imágenes se pueden observar en su Facebook personal: Lucho Urruti.
Más historias
- Clara padece una malformación arterio venosa en el hemisferio derecho y ya va por la tercera operación. «Con 18 años y haciendo deporte desde los 3, cada vez mas intensivo y de alto rendimiento. De un día al otro se derrumbó todo, me suspendieron todas mis actividades, mi deporte mas que nada… Que es lo que amo y disfrutaba hacer. Tenia miedo, pero sabía que podía y que todo iba a estar bien. Ya tuve 2 cirugías y aun espero otra. Hoy, afortunadamente estoy bien y recuperándome«, cuenta en parte de su relato.
- Agostina también tiene una historia difícil que contar. «De chica llamaba la atención por mi físico, era demasiado alta y grandota para mi edad; Por lo que no quedaban atrás comentarios de nadie. Deseaba tener otro cuerpo. Pero a pesar de ello, puedo decir que tuve una niñez muy feliz. A los 16 años me propuse a cambiar.
Pero caí en una obsesión , con la comida, la que cada vez era menos, y con entrenamientos, los que cada vez eran mas intensos. Lo que hacia por miedo a engordar y como degeneraba mi cuerpo era terrible, y cada vez peor.A los 17 padecía de anorexia; Y no podía parar. Fueron 3 años; de médicos, medicaciones, preocupaciones, prohibiciones, peleas, gritos y llantos. Donde lastime a quienes mas amaba, perdí miles de momentos y puse en juego mi vida.Hoy sigo superando cosas, pero cada vez son menos y ya sin peligrar mi vida. Para lograrlo se necesita contencion, ayuda y tiempo.Confiar en los demas, como en uno mismo. Cambiar ideas. Por que no es el peso, ni los músculos, ni la belleza la que te va a dar felicidad. Es lo que hagas vos con tu vida. Son los momentos que uno vive y con quien los vive. - María Emilia recordó que «cuando era una niña de 11 años, llegaba de la escuela me sacaba el uniforme y lo único que pensaba, como cualquier niño, era llegar de la escuela y salir a jugar.. Me acuerdo patente el día que corría con mi hermana y me frené porque me empezó a doler la pierna, era un dolor muy raro, como si me hubiera golpeado». Me hicieron estudios, biopsia, y me diagnosticaron un tumor óseo en el fémur. En medio de los tratamientos perdió la pierna.A los 24 años mi médico y mi kinesiólogo me hablan de una pierna con la cual hace años vivo soñando, una pierna que me haría tener una excelente calidad de vida a pesar de mi amputación, muy tecnológica, acorde a mi edad y mis actividades. Hoy con 26 años un 10 de noviembre, mi vida cambio.
Miles de personas de gran corazón sin conocerme,me dieron amor,fe,esperanza y juntos hicieron que alcance mi sueño.
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