Foto: La Voz del Interior.

Por Natalia Lazzarini- Especialistas admiten que la gente está cansada, pero advierten que los contagios pueden subir si la circulación es desordenada, como ocurrió el fin de semana largo.

Balnearios repletos y autos regresando de las Sierras a paso de hombre. La postal de este fin de semana largo activó la alerta de los especialistas, por el riesgo que implican estos movimientos. Recuerdan que la pandemia no terminó y que, de no organizar mejor estos movimientos turísticos, podría anticiparse un rebrote.

“Quizás por la expectativa de la vacuna o porque los casos están bajando, muchos creen que la pandemia ya pasó. Aquello que estuvo prohibido durante meses comenzó a liberarse de hecho. Aumentaron las fiestas clandestinas, no sólo de jóvenes, y este fin de semana los principales destinos turísticos estuvieron abarrotados”, apuntó Daniel Pizzi, especialista en salud pública.

El Ministerio de Salud provincial había advertido sobre el riesgo de las aglomeraciones y pidió a la población que no descuidara las medidas de autocuidado. “Se entiende el agotamiento, pero también es muy importante acompañarlas en cuanto a la toma de decisiones adecuadas”, plantearon ayer desde ese ministerio.

La Provincia anunció la semana pasada un esquema de aperturas progresivas para el turismo. Por el momento, sólo están permitidos los traslados interdepartamentales para personas que tienen casas de veraneo. Las salidas turísticas para los cordobeses se habilitarán el 4 de diciembre. Sin embargo, a juzgar por este fin de semana, los traslados se realizaron de hecho, con escasos controles en las rutas, y fueron masivos.https://f88d5c6ec7f1cf7b9c04fa3f2b529e44.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-37/html/container.html

Pizzi explicó que en 15 días se podrá medir el impacto de lo sucedido este fin de semana. El plazo coincide con el período de incubación del virus. Advirtió que los casos pueden aumentar, así como surgir un nuevo brote. “Me preocupan las nuevas flexibilizaciones. No hay que olvidar que Europa está viviendo su segunda ola, en parte por el relajamiento durante los meses de calor”, dijo.

Por su parte, Mariana Reznichenco, nefróloga y docente de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Córdoba, planteó que algunos indicadores duros, como las muertes por Covid-19, están comenzando a descender. Pero aclaró que, en epidemiología, los datos no hablan por sí mismos, sino que son construcciones. Indicó que el mensaje en este momento debería ser claro: “La palabra relajamiento debe ser desterrada de nuestro diccionario por largo tiempo”, indicó.

Aunque hay avances promisorios en el desarrollo de la vacuna, Reznichenco aclaró que todavía falta un largo camino. Y hay cuestiones relacionadas con el virus que aún no se conocen, como los daños que produce a largo plazo, la convalecencia de los que se enfermaron y las secuelas hasta en los jóvenes. “A todo eso hay que sumarle el gran riesgo de este momento: que quienes se venían cuidando dejen de hacerlo”, apuntó.

La especialista advirtió sobre el peligro de considerar la pandemia como algo del pasado, porque eso puede implicar más muertes en las próximas semanas. También opinó que no ayuda percibir los escasos controles en la circulación.

“Existen costos sanitarios que no tienen que ver con las aperturas de actividades en sí mismas, sino con las imágenes que estas transmiten. Personas que se agolpan en una ruta, que no usan barbijo y que comparten bebidas. Y es peligroso el discurso de que las restricciones a la circulación ya no son necesarias”, indicó.

Pizzi recomendó tomar la experiencia de este fin de semana largo como una prueba piloto para regular u organizar mejor la actividad turística de las próximas semanas y del verano. “Creo que las autoridades deberían tomar nota y decidir alguna medida, ya sea publicitaria o restrictiva, y, si no, volver atrás con algunas flexibilizaciones”, sostuvo.

Por su parte, Daniel Feierstein, sociólogo e investigador del Conicet, sugirió aplicar una “política de reducción de daños” para resolver el problema de las reuniones sociales: “Creo que en el país faltaron medidas de promoción que permitieran construir una nueva vida cotidiana. Entre agolparse en un balneario y no verse nunca con nadie, hay un enorme universo de grises. Si se comienza a notar una necesidad afectiva de ciertos encuentros, la gente debe saber cómo hacerlos y de qué manera”.

Miramar. La playa de la laguna Mar Chiquita, llena de visitantes el "finde" largo. (Gentileza Radio del mar)
Miramar. La playa de la laguna Mar Chiquita, llena de visitantes el «finde» largo. (Gentileza Radio del mar)

Salud insiste en mantener las medidas de autocuidado

El Ministerio de Salud provincial recomendó ayer seguir manteniendo las medidas de prevención. Por ahora, no se informó que se evalúen tomar medidas luego de la alta movilidad observada en las zonas turísticas el fin de semana largo.

“En referencia a la gran cantidad de gente que se vio este fin de semana en las Sierras, es muy importante seguir reforzando el manejo del autocuidado y de las medidas de prevención. Se entienden el cansancio y el agotamiento, pero también debemos acompañar a las personas en cuanto a la toma de decisiones adecuadas”, explicó Gabriela Barbás, secretaria de Prevención y Promoción de la Salud.

La funcionaria indicó que recién en 14 días se podrá evaluar el impacto sanitario de estas movilizaciones.

“Si elijo ir a un lugar, tengo que saber cómo comportarme, usar barbijo, estar distanciados y evitar aglomeraciones. Si tengo síntomas no moverme de mi hogar, igual que si soy contacto estrecho”, dijo Barbás.

“En esta etapa, en la que la baja del número de casos continúa, hay que profundizar este trabajo de educación continua en la población y de empoderamiento para no tener que retroceder y no tener un rebrote antes que lo esperado”, sostuvo la funcionaria provincial.

Fuente: La Voz del Interior